Vistos los últimos acontecimientos, condiciones y recursos con los que día a día desarrollamos nuestra actividad en la empresa no sabemos si a esto se le puede llamar dirección.
Esta mal llamada dirección demuestra, no a diario sino ya por horas, su manifiesta incapacidad y el no estar a la altura de sus trabajadores. Se toman decisiones unilaterales e incomprensibles en una organización que se define a sí misma como vanguardista y dinámica. Estas decisiones no son nuevas, pero empiezan ya a rozar el ridículo, sirva como ejemplo la tristemente conocida ya, como semana de vacaciones.
Los trabajadores vemos con inquietud como día a día nuestra empresa se deteriora, como en las diferentes plantas tenemos problemas con la seguridad, ya sea por los incidentes continuos con los carros, como pasa en P3, en bancos de la planta de montaje por falta de previsión, con la temperatura en pintura, exceso de humos en carrocerías por falta de preventivos o como se incrementan las posibilidades de sufrir un accidente por cambios de equilibrados incomprensibles. Este conjunto de decisiones son altamente preocupantes ya que parecen estar realizadas por alguna empresa de la competencia.
En el ámbito de las relaciones con los trabajadores la cosa no mejora, se pide continuamente la conformidad del trabajador en forma de firma ante cualquier circunstancia en el taller y se denigra continuamente al colectivo de oficinas con métodos de otros tiempos.
La Sección Sindical de UGT ya está denunciando, en los foros que corresponden, estas y otras situaciones. Así mismo nos tememos que algunos, en su afán de poder y prestigio ven a sus empleados como poco dignos para entablar una relación de entendimiento; parece ser que su ego no les permite ver más allá de sus narices. UGT ha demostrado ser un sindicato dialogante y comprometido con el futuro de la compañía y de sus trabajadores, pero si la dirección sigue enrocándose en su comportamiento, dificultará el dialogo responsable que nos caracteriza.
Esta Dirección no actúa como tal, dirigir es el desarrollo del conocimiento y la organización en la toma de decisiones en la empresa moderna y europea, esa a la que siempre aluden, la inversión y los trabajadores son su principal activo. Estar en un puesto de mando en una compañía global que quiera equipararse a modelos europeos, implica poner todo el empeño para que los trabajadores realicen bien su labor y se sientan parte integra de la empresa como tal.
Quizás la responsabilidad no sea de esta dirección y si de quien los coloca en su puesto .Cabe la posibilidad de que les venga grande una empresa como esta y sus trabajadores. ¿Quién tendría la brillante idea de nombrar chófer de un autobús a un invidente? A algunos la grandeza les es impuesta y a otros la grandeza les queda grande.
Sección Sindical UGT NISSAN, 12 de Junio de 2.012
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